En tan solo unos meses en el mercado español, Karlsson’s Gold se está convirtiendo en un vodka de culto para los expertos y en una bebida aclamada por los consumidores que se sorprenden con su potente sabor y aroma, cualidades poco comunes en los vodkas al uso que se caracterizan por su neutralidad, fruto del exceso de destilaciones a las que se somete al cereal, materia prima con la que se elaboran el 90% de los vodkas.
Para conseguir el distintivo sabor que caracteriza a este vodka, Karlsson’s Gold utiliza patatas nuevas, en lugar de cereal, y realiza una única destilación en columna. El resultado es un vodka que poco tiene que ver con el vodka que consumimos hoy día y que devuelve a este destilado la autenticidad de la que disfrutaba antiguamente.
Aunque sus características lo hacen idóneo para consumir solo o con hielo, simplemente combinado con Ginger Ale o con soda proporciona resultados espectaculares. Si a sus diferenciadas características organolépticas, le añadimos la imagen de la botella que ha recibido este año el León de Plata al Diseño en el Concurso Internacional de Publicidad Cannes Lion, Karlsson’s Gold llegará a ser sin duda el Grand Cru de los vodkas. No en vano la marca tiene el respaldo de los creadores del mítico Absolut Vodka, que decidieron embarcarse en un nuevo proyecto de creación del mejor vodka de patata del mundo, retomando la antigua receta de Suecia, abandonada desde los años 70.
El resultado ha sido un nuevo concepto vodka que rompe con los moldes establecidos.
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